El Réquiem de Mozart es una obra que habla de la vida, la muerte y la injusticia de los jueces. Esta obra es un homenaje al concepto de justicia con la que se tiene que vivir la vida. Todos podemos ser libres y tener una relación privada y personal con cada una de las religiones que existen en el mundo.
Esta obra arranca desde la relación privada que tenía Mozart con Dios al hacer Réquiem.
Maria Rovira lleva a escena una danza llena de alegorías a la vida, la muerte y la injusticia. A través de una danza hipnótica y energética, la coreógrafa fusiona diferentes estilos y diferentes culturas: danzas antiguas barrocas, africanas, budistas, indígenas, árabes… Todo inspirándose en el mundo que rodea estos sentimientos comunes a toda la humanidad desde hace siglos.
Una alegoría a la vida, la muerte y la injusticia con orquesta, coros y solistas en directo.
Maria Rovira aplica su baile a la cultura espiritual y religiosa del mundo actual. Todos los conceptos de los textos “EL REQUIEM DE MOZART” están escritos en el año 1790, pero son de rigurosa actualidad. La coreografía partirá de una danza religiosa, espiritual, de diferentes estilos y de diferentes culturas. Llevará todas estas danzas a su estilo, utilizando lo que ha investigado de cada tipo de danza y movimiento.
La obra se Iniciará con danzas antiguas y religiosas, un baile astronómico creado por los egipcios y después imitado por los griegos, que se redujo a una representación de los pasos bien mesurados y figuras muy relacionadas con el movimiento de los astros. Las danzas africanas, que en este caso son la tierra y el cielo. Las danzas budistas, que tratan de ser las danzas interiores de poco movimiento y que a la vez remueve los sentimientos. Las danzas indígenas, que nos trasladan a un camino en el que lleva a la gente que se está muriendo hacia la otra vida. Y finalmente el movimiento de las danzas árabes, que giran alrededor del mundo y que optan por un movimiento estable, pero que a su vez, quieren volar, liberarse y después marchar.
Maria Rovira sigue profundizando en la investigación y esto se materializa en el estilo de danza moderna de la compañía.
María Rovira, la reconocida coreógrafa internacional que ha pasado los últimos años trabajando en el extranjero y desde hace dos años se ha involucrado en la creación “CREA DANCE FOUNDATION”, cuya realidad es un hecho y se presentara el próximo 18 de octubre por la mañana en la sede de la fundacion.
María Rovira se ha formado en danza clásica, contemporánea y flamenco. Empezó sus estudios de danza en el Instituto del Teatro de Barcelona. Estudió danza contemporánea en el Conservatorio Internacional de la Danza de París y en la escuela de Merce Cunningham y Martha Graham en Nueva York. También estudió en la Folwang Shule en Essen con Pina Baush.
En 1985, Rovira crea en Mataró (Barcelona) Trànsit Dansa, una de las compañías pioneras en la danza moderna en España con repercusión internacional. En 1998 se le concedió el Premio Nacional de Danza por su gran trayectoria artística nacional e internacional. El año 2012 se convierte en la directora artística del Ballet Folklórico de Antioquia en Medellín (Colombia).
Además de las creaciones de Transit Dansa, Rovira combina una carrera como coreógrafa independiente que le ha llevado a trabajar en varias compañías internacionales como el Ballet Hispánico de Nueva York, el Ballet Nacional de Cuba, el Ballet Nacional de Uruguay, el Ballet Nou Món de Caracas, la compañía Els del Medium de Costa Rica, el Ballet Nacional de Paraguay, el Ballet Concierto de Puerto Rico, la compañía Nacional de Danza de Puerto Rico, la compañía Maximiliano Guerra de Argentina, la Bauhaus, el Ballet de la Ópera de Dessau, el Ballet de Magedemburg y el American Dance Festival.
Durante los último años ha creado múltiples coreografías para la compañía de Carlos Acosta y ha coreografiado la película Yuli, que se presentó la edición pasada en el festival de San Sebastian, con gran éxito de crítica y público y que está basada en la vida de Acosta y dirigida por Íciar Bollaín. También con la compañía de Acosta Danza y sus nuevos bailarines de Barcelona, se le encargó la producción de un fragmento de “El salto de Nijinsky” para el Festival Grec, donde obtuvo un gran éxito y se le concedió la mejor crítica de danza del año 2017.
Actualmente con el segundo proyecto de la Fundación para la danza Crea Dance Foundation “REQUIEM DE MOZART”
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