La Torre Agbar podrá convertirse finalmente en un hotel y continuará iluminada. Los actuales propietarios del edificio, la firma Emin Capital, han explicado este viernes en un comunicado que el departamento de Urbanismo del Ayuntamiento de Barcelona ha hecho una «excepción» a la moratoria de nuevas licencias hoteleras dictada el 2 de julio y les ha reconocido su potestad legal para poder presentar y tramitar el proyecto previsto para el emblemático edificio del skyline barcelonés.
«Los responsables del Área de Urbanismo del Ayuntamiento de Barcelona, notificaron [el jueves] a Emin Capital que, de acuerdo con el marco legal, será posible presentar y tramitar el Proyecto para la transformación de la Torre Agbar para uso hotelero», señala la compañía en un comunicado. La justificación, según el fondo inversor, es que solicitaron un Certificado de Régimen Urbanístico -que da derecho automáticamente a la licencia- con fecha anterior a la entrada en vigor de la moratoria, que se establece cuando es publicada en el Boletín Oficial de la Provincia de Barcelona.
Así, la torre de oficinas, diseñada por Jean Novel, cumple diez años en las Glòries y se transformará en un alojamiento de gran lujo de la cadena Hyatt. Tras la luz verde municipal, la compañía ha anunciado que «la iluminación de la torre Agbar seguirá encendida como habitualmente» con sus coloridas cenefas de luces LED, en vez de dejarla a oscuras a partir mañana sábado -como anunció hace dos semanas- en protesta por la moratoria.
En el texto remitido a los medios de comunicación, el presidente de la compañía, Jordi Badia, da las gracias a la teniente de alcalde responsable de Urbanismo, Janet Sanz, y a todo su equipo técnico por «su colaboración y buena disposición para facilitar una inversión que sin duda contribuirá significativamente a la actividad económica de la ciudad». Emir Capital sorprendió al sector inmobiliario y hotelero hace dos años al comprar la icónica torre de la sociedad gestora de aguas por unos 150 millones de euros. Agbar está finalizando estas semanas su traslado a la nueva sede en la Zona Franca y en breve el edificio quedará vacío y listo para su transformación, que coincidirá con la metamorfosis del nudo viario de Glòries en un gran parque rodeado de equipamientos y espacios de ocio.
Fuente: La Vanguardia