Su Gelateria TU, en la localidad de Domodossola (Piemonte), ha sido reconocida durante siete años consecutivos por la prestigiosa guía Gambero Rosso Sus piezas se caracterizan por la gran calidad de la materia prima y la elaboración cien por cien artesanal en el obrador de la heladería Cuando el heladero italiano Maurizio Lunardi abrió su heladería Amarena en su Domodossola natal (una pequeña localidad en la región del Piemonte), no podía imaginar que poco después la prestigiosa guía italiana Gambero Rosso iba a reconocerle como uno de los mejores maestros heladeros del país. Así ha sido durante siete años consecutivos, que han convertido a Amarena en uno de los establecimientos heladeros de referencia en este país. Gambero Rosso destaca de este establecimiento «la excelente selección de las mejores materias primas y su transformación totalmente artesanal, así como la cortesía y dedicación hacia el cliente». Con un prestigio más que consolidado en su Italia natal, a Lunardi comenzó a rondarle una pregunta que finalmente le llevó a trasladarse a Barcelona y abrir Cloud, su flamante heladería en el corazón del barrio de Gràcia: ¿se apreciará la calidad de un auténtico helado de tradición italiana en el resto del mundo?. La respuesta ha sido rotundamente sí, y su obrador de helado ubicado en la plaza Rovira i Trias es siempre un festival de clientes de todas las nacionalidades atraídos por la autenticidad de los helados italianos tradicionales, elaborados sin aditivos: simplemente con una combinación de la mejor materia prima procedente de proveedores de confianza y las mejores manos. Lunardi es un apasionado del helado, una pasión que transmite ahora a sus clientes de Cloud, donde las creaciones que salen a diario de su obrador revelan las tablas del heladero, que ha colaborado también con numerosos restaurantes en Italia. Con una dilatada formación en la materia, buena parte de la mano del prestigioso Marco Carnevale, de la heladería Macam (en Novara), Maurizio ofrece una selección de helados tradicionales que conviven con otras creaciones mucho más originales y contemporáneas. Entre los sabores de siempre, el más demandado sigue siendo el sorbete de chocolate negro, seguido del de pistacho, del que encontramos dos variedades que levantan pasiones entre su clientela: uno más tradicional de la variedad Bronte natural y otro con un pistacho siciliano tostado. Destaca también su particular helado de crema umami, una creación exclusiva que propicia un encuentro de sabores dulce, salado, amargo y ácido en una sola pieza. Tiene también un helado de cerveza y así un sinfín de sabores originales a rabiar que van surgiendo de la imaginación de este artesano que, después de casi un año instalado en el meollo de Barcelona ha conseguido responder con creces a la pregunta que le trajo aquí.»No deja de sorprenderme la gran acogida que está teniendo Cloud. Americanos, asiáticos, locales… Todo el mundo es capaz de valorar el helado tradicional italiano y esa es, día tras día, mi mayor satisfacción», explica Lunardi. Heladería CLOUD Plaça Rovira i Trias, 5. Horario: de lunes a sábado de 12 a 23 h y domingo de 11 a 23 h. @cloud.barcelona |