Henrik Johan Ibsen (Skien, 20 de marzo de 1828 – Cristianía [actual Oslo], 23 de mayo de 1906) fue un dramaturgo y poeta noruego. Es considerado el más importante dramaturgo noruego y uno de los autores que más han influido en la dramaturgia moderna, padre del drama realista moderno y antecedente del teatro simbólico.
En su época, sus obras fueron consideradas escandalosas por una sociedad dominada por los valores victorianos, al cuestionar el modelo de familia y de sociedad dominantes. Sus obras no han perdido vigencia y es uno de los autores no contemporáneos más representado en la actualidad.
Su padre, un próspero comerciante, se arruina cuando Henrik cuenta ocho años de edad y la familia debe trasladarse a una granja en las afueras de Gjerpen, única propiedad que logra salvar de la quiebra. Allí el pequeño Henrik deberá recorrer 5 kilómetros para asistir a la escuela y se convierte en un niño introvertido y solitario.
En 1842 regresan a Skien y Henrik, con 14 años, ingresa en un colegio religioso, sin embargo, años después, y en su edad madura, se declaraba ateo. Permanecerá en él hasta los 16 años, cuando las necesidades económicas le obligan a desplazarse a la pequeña ciudad de Grimstad para trabajar durante seis años como aprendiz de farmacia. Durante su estancia en Grimstad apenas se relaciona, acentuándose su carácter introvertido. Termina los estudios de secundaria y comienza estudios de medicina (que nunca terminará), se interesa por la literatura y escribe sus primeros poemas y obras dramáticas. De esta época son los poemas Resignación y En otoño y los dramas de carácter romántico Catilina y La tumba del guerrero (o El túmulo del héroe).
En 1850 se traslada a Cristianía, donde, después de intentar retomar los estudios, a pesar de llevar una existencia de penurias económicas decide vivir de sus obras. Publica Catilina bajo el seudónimo de «Brynjolf Bjarme» que es mal acogida por la crítica y no consigue que sea representada. Colabora con el periódico de la Sociedad de Estudiantes Samfundsbladet y con la revista satírica de literatura y política Andhrimner. El 26 de septiembre de 1851 se representa por primera vez una de sus obras, La tumba del guerrero, en el Cristianía Theater.
En 1852 consigue trabajo en el recientemente establecido Det norske Theater de Bergen, con el compromiso de estrenar una de sus obras al año. Estrena cuatro obras: La noche de San Juan (1853), una nueva versión de La tumba del guerrero (1854), La señora Inga de Ostraad (1855) y La fiesta en Solhaug (1856). En Bergen conoce a Susannah Thoresen, la hija de un clérigo protestante, con la que contraerá matrimonio el 18 de junio de 1858. En 1857 realiza viajes de estudios a Dresden y Copenhague.
En septiembre de 1857 regresa a Cristianía para hacerse cargo de la dirección artística del Cristianía Norske Theater hasta su quiebra en 1862. En 1858 estrena: Los vikingos de Helgeland . Ese mismo año nace su hijo Sigurd y en años siguientes publica sus poemas Paa Viddeme (En las planicies) y I billedgalleriet (En la galería de arte) y escribe el drama La comedia del amor. A la quiebra del teatro le siguen meses de penuria económica; solicita a la Universidad una beca para viaje de estudios, le es concedida y viaja al oeste de Noruega recopilando datos sobre sus expresiones folclóricas. Escribe y publica el drama Los pretendientes de la corona (1863. Según tema concebido en 1858).
En 1864 abandona Noruega y se dirige a Roma donde un año después se reunirá con su familia. Ibsen consideró no vivir en el ambiente luterano y conservador de Cristianía e inició un exilio voluntario de 27 años. En Roma residirá 4 años.
En 1868 se traslada a Alemania donde residirá primero en Dresde (1868-75) y más tarde en Múnich (1875-78). Ibsen es ya un dramaturgo con reconocimiento internacional y sus obras se representan en diversos países de Europa. En 1869 viaja a Egipto invitado como representante noruego a la inauguración del Canal de Suez. En 1873 es elegido miembro del jurado de arte internacional en la Exposición Universal de Viena. En 1878 vuelve a Roma, esta vez para residir durante siete años. Es en todo este tiempo de exilio voluntario cuando escribe su principal obra dramática, sus dramas realistas y simbolistas.
En 1891, a los 63 años de edad, regresa definitivamente a Noruega y en 1895 fija su residencia en Cristianía. En 1898 Cristianía, Copenhague y Estocolmo (las tres capitales escandinavas) celebran solemnemente el septuagésimo aniversario de Ibsen. Sigue escribiendo, de esta época es su drama Juan Gabriel Borkman (1896) entre otras. En 1900 sufre un primer ataque de apoplejía al que le sucederán otros y que irán minando su salud hasta dejarlo postrado en cama totalmente paralítico. Muere el 23 de mayo de 1906 a los 78 años de edad.
La obra dramática de Henrik Ibsen puede dividirse en tres etapas. Una primera etapa romántica que recoge la tradición y el folclore noruego. En estas obras retrata lo que él consideraba defectos del carácter noruego. Obras significativas de este periodo son:
Brand (1866). Simbólicamente retrata la falta de solidaridad de escandinava frente a la invasión prusiana de Dinamarca; su protagonista el sacerdote Brand sacrifica a su mujer y a su hijo por mantener sus principios.
Peer Gynt (1868). Mediante su protagonista Peer, un soñador inconsecuente sin fuertes convicciones que deja todo a cargo de su fantasía, caricaturiza el genio noruego.
Una segunda etapa sería la que se ha llamado realismo socio-crítico. En esta segunda etapa Ibsen se interesa por los problemas sociales de su tiempo y los convierte en tema de debate. Los estrenos de sus obras se convirtieron en grandes polémicas cuando no en grandes escándalos. Ibsen en estas obras cuestiona los fundamentos de la sociedad burguesa. De esta etapa son sus obras de tesis:
Casa de muñecas (1879). Desde sus primeros estrenos el 21 de diciembre de 1879 en el Teatro Real de Copenhague y el 20 de enero de 1880 en el Teatro Nacional de Cristianía, Nora, su protagonista, y su portazo final, se convirtieron en bandera del feminismo y su autor en abanderado. Ibsen plantea en esta obra, con el matrimonio Helmer, la relación entre sexos. Según sus propias palabras:
«Existen dos códigos de moral, dos conciencias diferentes, una del hombre y otra de la mujer. Y a la mujer se la juzga según el código de los hombres. […] Una mujer no puede ser auténticamente ella en la sociedad actual, una sociedad exclusivamente masculina, con leyes exclusivamente masculinas, con jueces y fiscales que la juzgan desde el punto de vista masculino».
(Notas para la tragedia actual. Ibsen.)
Casa de muñecas se estrenó en gran parte de los países de Europa generando una enorme polémica, siendo inevitable posicionarse a favor o en contra de su protagonista Nora, su portazo final fue motivo de escándalo (Ibsen cambió este final para su estreno en Alemania), sectores opinaron que era un ataque a los fundamentos de la familia.
Espectros (1881). Su protagonista la señora Alving, siguiendo el consejo del pastor Manders, vive junto a su marido simulando ser feliz, siguiéndole en sus vicios e intentando ocultarlos, preservando la imagen respetable que la sociedad mantiene sobre él. Estrenada en Berlín fue prohibida el día de su estreno, fue igualmente prohibida durante quince años en Noruega al considerarla disoluta y revolucionaria.
Un enemigo del pueblo (1882). Quizá esta obra surja como contestación a los ataques que Ibsen sufrió por su obra Espectros. Es el drama de un hombre de convicciones frente al pragmatismo de la sociedad. Su protagonista, el Doctor Stockmann, denuncia que las aguas del balneario, principal fuente de ingresos del pueblo, están contaminadas y son un peligro para la salud. Las fuerzas sociales del pueblo tratan de ocultarlo y queda solo en su denuncia. En un momento dado el Doctor Stockmann se expresa así: «He descubierto que las raíces de nuestra vida moral están completamente podridas, que la base de nuestra sociedad está corrompida por la mentira». Y cuando al fin queda solo y debe abandonar el pueblo con su familia la obra termina con su juicio, tal vez el sentimiento de Ibsen después del estreno de Espectros: «El hombre más fuerte del mundo es el que está más solo».
El pato silvestre (1884). En esta obra aun siendo realista da un paso hacia la tercera etapa del autor, el simbolismo. Este drama, aparentemente, ya no sería social sino íntimo, en el que nos habla sobre si es posible al hombre regenerarse; pero extendiendo el simbolismo, ese pato silvestre herido que se aferra al fango del fondo del lago para morir, bien podría ser una sociedad que se niega a oír la verdad, que sería su salvación, y se aferra a su mentira. Su personaje el Dr. Redling dirá a modo de conclusión: «La vida podría ser bastante agradable si no llamasen a la puerta esos acreedores reclamando el cumplimiento de los ideales a pobres hombres como nosotros».
La tercera etapa de Ibsen es la simbolista, en esta etapa predomina un sentido metafórico. Son obras significativas de esta etapa: La dama del mar (1888), Hedda Gabler (1890) y El maestro constructor (1892)
Uno de los máximos defensores del teatro de Ibsen sería el premio Nobel Bernard Shaw . De su teatro diría que es el máximo representante de «la obra bien hecha», refiriéndose a la obra bien construida, donde personajes y trama son verosímiles, perfectamente creíbles, por lo que al espectador le es fácil identificarse con ellos.
El teatro de Ibsen influyó en otros autores de su tiempo, en los entonces jóvenes Strindberg y Chejov. El teatro del siglo XX es su deudor y aun hoy sus obras no han perdido vigencia siendo muy representadas en todo occidente.
Obras dramáticas
Catilina (1848-1850)
La tumba del guerrero (1851)
La noche de San Juan (1852)
La señora Inger de Ostraat (1855)
La fiesta de Solhaug (1856)
Olaf Liliekrans (1857)
Los guerreros de Helgeland (1858)
La comedia del amor (1862)
Los pretendientes de la corona (1863)
Brand (1865)
Peer Gynt (1867; como poema dramático)
La unión de los jóvenes (1869)
Emperador y Galileo (1873)
Brand (1879)
Peer Gynt (1876; versión teatral)
Las columnas de la sociedad (1877)
Casa de muñecas (1879)
Espectros (1881)
Un enemigo del pueblo (1882)
El pato silvestre (1884)
La casa de Rosmer (1886)
La dama del mar (1888)
Hedda Gabler (1890)
El maestro constructor (1892)
El niño Eyolf (1894)
Juan Gabriel Borkman (1896)
Al despertar de nuestra muerte(1899)
Bibliografía
Revista de la Asociación de Directores de Escena de España: ADE. Nº 110 abril-junio de 2006. Centenario Henrik Ibsen. Varios autores.
Historia básica del arte escénico, de Cesar Oliva y Francisco Torres Monreal. Ediciones Cátedra. Madrid.
Obras de Henrik Ibsen. Versión y prólogo de Ana Victoria Moncada. Editorial Porrúa. México.
El tesoro dramático de Henrik Ibsen, de Salvador Albert. Editorial Minerva. Barcelona.
Ibsen y su tiempo, de Enrique Anderson Imbert. Editorial Yerba Buena. Buenos Aires.