El Museo de Arte Moderno (llamado también MoMA, siglas en inglés de Museum of Modern Art) es un museo de arte situado en Manhattan en el 11 West con la calle 53 de Nueva York. El Museo de Arte Moderno abrió sus puertas al público el 7 de noviembre de 1929, y fue fundado por los filántropos estadounidenses Lillie P. Bliss, Mary Quinn Sullivan y Abby Aldrich Rockefeller1 para «ayudar a la gente a entender, utilizar y disfrutar de las artes visuales de nuestro tiempo». Es uno de los mejores museos de arte moderno del mundo.
El Museo se fundó como entidad privada, beneficiándose de numerosas donaciones de sus miembros y de empresas, siendo un ejemplo para otros museos de su clase, ampliando las fronteras del arte a disciplinas no admitidas en otras galerías.
Es considerado uno de los santuarios del arte moderno y contemporáneo del mundo, constituyendo (a juicio de muchos) una de las mejores colecciones de obras maestras. Alberga piezas tales como La noche estrellada de Van Gogh, Broadway Boogie Wogie de Piet Mondrian, Las señoritas de Avignon (1906) de Pablo Picasso, La persistencia de la memoria de Salvador Dalí y obras de artistas norteamericanos de primera fila como Jackson Pollock, Andy Warhol y Edward Hopper. El MoMA posee además importantes colecciones de diseño gráfico, diseño industrial, fotografía, arquitectura, cine e impresos.
Cuando el Museo de Arte Moderno comenzó a exponer sus obras, gran parte del público de aquella época despreciaba el cubismo y el arte abstracto, porque chocaban con las líneas directrices que hasta ese momento marcaban la pauta del «verdadero arte».
De las primeras vanguardias del siglo XX, el MoMA conserva obras clave de Pablo Picasso, Marc Chagall, Kandinsky, Mondrian, Henri Matisse, etc. Tiene un Jardín de Esculturas con obras Auguste Rodin, Alexander Calder, Louise Nevelson, Pablo Serrano y Aristide Maillol, además de una sala de cine.
Después de cuatro años de reformas, en 2004 fue inaugurado el nuevo MoMA, con casi el doble de espacio. En 2012 ha sido el primer museo del mundo en en adquirir el código fuente de videojuegos al considerarlos arte, entre ellos, Pac-Man (1980) y Tetris (1984).