Para conmemorar el décimo aniversario de la Fábrica Moritz, la cervecera abre un nuevo establecimiento con el objetivo de ser un nuevo punto de encuentro para los barceloneses. La cerveza fresca sin pasteurizar proveniente de la Fábrica Moritz Barcelona será la gran protagonista. Jordi Vilà está al frente de la oferta gastronómica del nuevo establecimiento, con una carta con la cerveza como el epicentro del recetario. Barcelona, 16 de diciembre de 2021. A finales del siglo XIX, Louis Moritz abrió una cervecería en la esquina de la calle Sepúlveda con Muntaner, muy cerca de la Fábrica donde se elaboraba la primera cerveza de Barcelona. Dice la leyenda que la cerveza que se servía era tan fresca porque venía directamente de la Fábrica a través de unos conductos subterráneos que unían los dos establecimientos. Ahora, más de un siglo después, Moritz abre su tercer establecimiento en una de las calles más céntricas y emblemáticas de la ciudad: la Rambla de Catalunya. Un espacio de degustación y encuentro. Casa Moritz es un espacio de más de 300 m², con terraza exterior, cocina semiabierta, y con un horario muy amplio que cubrirá todas las comidas. La cerveza que brotará de los surtidores de esta nueva cervecería también será fresca y sin pasteurizar, ya que procederá directamente de la Fábrica Moritz Barcelona, sin misteriosos conductos subterráneos sino que llegará gracias a los tanques y a los barriles donde se transportará y se mantendrá la cerveza. También se podrán degustar las recetas firmadas por el chef Jordi Vilà. Décimo aniversario de la fábrica Moritz Casa Moritz llega 10 años después de la inauguración de la Fábrica Moritz Barcelona, con el objetivo de convertirse en el punto de encuentro de los barceloneses en pleno corazón del Eixample. Para la fábrica Moritz el responsable del proyecto fue el arquitecto francés Jean Nouvel, con una reforma en 2019 de la Moritz Store a cargo de los barceloneses External Reference, un estudio vanguardista que combina la arquitectura con las artes visuales, y que ahora es se han encargado de este nuevo proyecto. Tal y como explica Carmelo Zappulla, arquitecto jefe del proyecto, “en Casa Moritz reivindicamos las paredes desnudas, los materiales constructivos, nos gusta enseñar su historia y el paso del tiempo. Descubrimos el ladrillo y algunas vueltas catalanas. Hemos realizado una intervención mínima en el local”. Además de las tonalidades cálidas que recuerdan el proceso de producción de la cerveza, en Casa Moritz también pueden verse sorprendentes detalles en el mobiliario. Por ejemplo, las lámparas sopladas de cristal de forma artesanal hechas por Ferran Collado, inspiradas en los barriles de cerveza y que son como las que ya iluminan la Fábrica Moritz Barcelona; y una gran lupa en la entrada que hará referencia a las espumas y las texturas de la cerveza. Y en el espacio el interior, External Reference y Oxido Studio han cogido latas de cerveza Moritz descartadas, las han fundido y este aluminio resultante se ha utilizado en la base de una de las mesas que llenan la nueva cervecería. Sin olvidar la gran barra hecha de estaño siguiendo la intervención de Jean Nouvel en la fábrica. Gastronomía con Jordi Vilà La experiencia, el reconocimiento y la buena mano del chef Jordi Vilà -uno de los máximos representantes de la cocina catalana de los últimos años y Premio Nacional de Gastronomía 2021- también está presente en Casa Moritz. Vilà está al frente de la oferta gastronómica del nuevo establecimiento, con una carta con la cerveza como el epicentro del recetario. La cerveza Moritz como acompañamiento ideal de la propuesta de Vilà y su equipo, pero también como ingrediente de unos platos elaborados íntegramente en la cervecería. “En Casa Moritz estarán los platos más exitosos de la Fábrica como el pollo a la Moritz”, explica el chef. Se trata de un pollo pequeño, de carne sabrosa y tierna servido con una lata de cerveza en su interior. “También se podrán probar las famosas flammkuchen –conocidas como las pizzas alsacianas, que aterrizaron en Barcelona gracias a la Fábrica Moritz-, las deliciosas tapas como croquetas, patatas bravas o ensaladas rusas; los bocadillos gastronómicos; las albóndigas hechas con cerveza negra o los mejillones al vapor de Moritz 7; así como las propuestas XXL pensadas para ser compartidas”, añade. Y para responder a los deseos de aquellos que buscan propuestas más healthy, a los platos más populares se les ha dado una pátina más saludable, con ensaladas y platos veganos como el “tombet” mallorquín. Cervezas frescas sin pasteuritzar Las mismas variedades frescas que produce la Fábrica -Moritz Original, Moritz 7, Epidor, Red Ipa y Moritz Negra- también las ofrecerá Casa Moritz. Llegarán en tanques refrigerados que mantendrán la cerveza tan fresca y perfecta como la de la Fábrica. Además, también se podrán degustar las cervezas estacionales de temporada que van cambiando cada cuatro o cinco meses y las pop-up beers, cervezas de ediciones ilmitadas que se elaboran para celebrar fechas especiales, como la Rosa de Moritz por Sant Jordi, la Moritz Verbena por San Juan y la Moritz Segadors por la Diada. Todas estas variedades se podrán disfrutar directamente en la cervecería o en casa, ya que también se podrán comprar para llevar. Corner de la Moritz Store La pasión por el diseño y el cuidado por los detalles que identifica a la Moritz Store tendrá su réplica en Casa Moritz con una selección de los productos más vendidos repartidos en tres grandes categorías: la ropa, como camisetas, sudaderas y el mítico maillot amarillo inspirando en el antiguo equipo ciclista Moritz; las piezas de la vajilla cervecera -jarra, copa, vaso…etc. Y finalmente los artículos relacionados con el inconfundible Moritz 600, desde réplicas hasta llaveros y otras piezas para los auténticos fanáticos del vehículo. En la planta baja, justo al lado de la entrada, hay uno de los elementos que más miradas abrumaron: se trata del hocico de un Moritz 600, vehículo que ya se ha convertido en un emblema de la marca. SOBRE MORITZ BARCELONA Moritz es la primera cerveza de Barcelona, des de 1856, que todavía se encuentra en el mercado, concebida por Louis Moritz hace más de 160 años. Instaló su cervecería en la Ronda Sant Antoni y esta fábrica de cerveza sigue siendo un punto de encuentro en Barcelona y es parte de su historia. La quinta y sexta generación de la familia siguen convirtiendo la marca en un icono de la ciudad de Barcelona. Gastronomía, cultura, diseño, historia y sobre todo cerveza se reúnen en unos espacios que mezclan tradición y modernidad: la Fàbrica Moritz Barcelona y el legendario bar El Velódromo. La cervecera conserva la fábrica original creada por Louis Moritz en el centro de Barcelona (Ronda Sant Antoni, 39) donde elabora diariamente los 365 días del año cerveza fresca sin pasteurizar. Este espacio también cuenta con el Moritz Beer Lab, el espacio de I + D + I de la marca que les permite innovar y crear cervezas de temporada que cambian regularmente. Moritz Barcelona ofrece una amplia variedad de cervezas capitaneadas por la Moritz Original, elaborada 100% con ingredientes naturales entre los cuales destaca el lúpulo de Saaz, que le otorga su característico sabor aromático. También produce la Moritz Epidor (una cerveza Tostada Extra de larga fermentación elaborada con ingredientes naturales, como la malta caramelizada), la Moritz 0,0 (sin alcohol con lúpulo de Saazl), la Moritz Red IPA (la primera Moritz de alta fermentación, Red India Pale Ale), la Moritz Radler (cerveza con zumo de limón natural) y la Moritz 7 (100% malta). | |